
Desde la Intersindical Sanidad, sector sanitario de la Confederación Intersindical, denunciamos la alarmante precariedad laboral que afecta al personal sanitario durante la época veraniega. La expansión del modelo neoliberal ha llevado a la mercantilización de servicios esenciales, dejando en evidencia un sistema que prioriza el beneficio económico por encima del bienestar de la clase trabajadora y, en consecuencia, de la población en general.
Los contratos de verano, que deberían ser una oportunidad para fortalecer el sector sanitario, se han convertido en herramientas de explotación. Con salarios precarios y condiciones laborales que no garantizan ni la estabilidad ni la dignidad necesarias, estos contratos reflejan una estrategia empresarial que busca maximizar beneficios a costa de la salud de la clase trabajadora. No es raro ver cómo las jornadas laborales son agotadoras, con turnos interminables que afectan no solo la salud física, sino también la salud mental del personal.
La temporalidad y la inestabilidad convierten al personal sanitario en piezas desechables de un engranaje que opera sin considerar sus derechos. Este es un escenario, característico del capitalismo en su forma más despiadada. Es necesario, por tanto, señalar que detrás de cada servicio de salud hay una trabajadora que merece ser tratada con respeto y dignidad, no como un mero recurso que puede ser cambiado o desechado al finalizar la temporada.
Desde la Intersindical Sanidad, hacemos un llamamiento a todos los trabajadores y trabajadoras del sector a unir fuerzas y luchar contra esta dinámica opresiva. La defensa de nuestros derechos laborales no solo es una lucha por mejores condiciones, sino una acción fundamental para salvaguardar la salud de la población.
¡No más precariedad!
La lucha continúa
Secretariado Intersindical Sanidad