
¡Basta de explotación! ¡Ni una muerte más por calor!
Desde la Confederación Intersindical denunciamos, con toda contundencia, la explotación intolerable que sufren miles de trabajadoras y trabajadores obligados a desempeñar su labor bajo temperaturas extremas. En plena ola de calor, mientras se baten récords térmicos, muchas empresas continúan anteponiendo sus beneficios a la salud e incluso a la vida de quienes generan su riqueza.
La reciente muerte de una trabajadora en Barcelona por un golpe de calor no es un accidente, es una consecuencia directa de un sistema que desprecia a la clase trabajadora y permite que se nos exponga a condiciones laborales inasumibles. No se trata de un caso aislado: es la punta del iceberg de una realidad de precariedad, desprotección y abandono.
Los sectores más expuestos –limpieza, construcción, agricultura, reparto, cuidados, entre otros– son los más castigados, y dentro de ellos, especialmente las mujeres, migrantes y personas con contratos temporales. Mientras tanto, las instituciones responsables de velar por la salud laboral siguen sin actuar con la contundencia que exige la gravedad de esta situación.
Ante este escenario, desde la Confederación Intersindical exigimos:
• La paralización inmediata de la actividad laboral en las horas de máximo riesgo térmico.
• La adaptación de las jornadas laborales a las condiciones climáticas.
• Acceso garantizado a agua potable, zonas de sombra y pausas de descanso adecuadas.
• Equipamiento de protección frente al calor y protocolos reales de actuación.
• Campañas de inspección laboral intensivas y sanciones ejemplares a las empresas incumplidoras.
No podemos normalizar que trabajar signifique jugarse la vida. No aceptamos que nuestras compañeras y compañeros sigan pagando con su salud los márgenes de beneficio de las empresas.
Por ello, hacemos un llamamiento a toda la clase trabajadora: a los comités de empresa, delegadas y delegados sindicales, plataformas, asambleas y organizaciones sindicales a organizarse, a denunciar colectivamente y a movilizarse para defender el derecho a unas condiciones laborales dignas y seguras.